Comprometidos
Sostenibilidad
y Medio Ambiente
Nos encontramos inmersos en un cambio de paradigma en el sector de la construcción.
El enfoque tradicional ha dado paso a un conjunto de técnicas innovadoras que reducen la huella ecológica del proceso.
La construcción modular y la maquinaria está en el centro de esta transformación, especialmente ante las exigencias cada vez más estrictas de los gobiernos y las entidades supranacionales en materia de sostenibilidad: medioambiental, económica y social. A todo ello se le une un panorama que refleja una escasez de mano de obra y una demanda cada vez mayor de soluciones ágiles y de calidad, a la que la construcción modular responde de manera óptima.
El uso de materiales prefabricados dota al sistema modular de versatilidad motivando que este sistema constructivo sea un auténtico modelo de economía circular.
Hechos reales,
pilares sostenibles.
80% de energía que consumimos es solar.
1.060 Paneles solares de 300Kw – 345Kw.
Ahorro de 208 toneladas de CO2 al año.
Equivalente a plantar 13.900 árboles.
Fomentar la formacióny los derechos de las personas.
El reciclaje y reutilización de los materiales de modo individual y de la construcción de modo global, posibilitan que un mismo edificio sea reutilizado en otra localización, dándole otros usos o incluso con diferentes prestaciones.
La construcción prefabricada modular cumple con las exigencias de mayor sostenibilidad Medioambiental, Social y Económica:
La reducción de tiempos permite construir con menor presupuesto y tiempo de transporte, suponiendo un menor impacto al medioambiente. La modulación, no sólo de los espacios constructivos si no de los procesos de diseño, resultan una optimización de los recursos que se traduce en ganancias económicas y medioambientales al generar menos residuos y mermas.
Sin duda, la principal ventaja de la construcción modular prefabricada frente a los sistemas tradicionales de construcción es que remplazamos la demolición de los edificios por la re-ubicación de éstos, dándole una segunda vida a la mayoría de los elementos constructivos con los que trabajamos y evitamos así uno de los mayores procesos contaminantes de la construcción.
Como impacto social, la baja de siniestralidad y especialización requerida para la construcción en planta ofrece un desarrollo profesional atractivo para los trabajadores de planta.
